Lo primero que deberíamos tener claro es la naturaleza de cada uno, pues nos da las claves de cómo actuar con ellos y entender sus distintos comportamientos. Gatos y perros son muy distintos y funcionan de manera, también, muy distinta.

Si tienes pensado adoptar un gatito o perrito, o acabas de hacerlo este post te va a ser de mucha ayuda.

Cuando nos llega un gatito o un perrito a casa por primera vez desconocemos todo de ellos y actuamos sin ton ni son. Las recomendaciones y explicaciones del veterinario son fundamentales para que nuestra mascota se encuentre lo mejor posible y sea feliz.

Naturaleza del perro:

Es la primera mascota que tuvo el ser humano. Ya en la prehistoria, hace unos 30000 años, el antepasado del perro seguía a las tribus que, tras cazar, dejaban restos que ellos aprovechaban. Al final se integraron en ellas y convivían con los primeros humanos. Las primeras muestras de esa convivencia se hallaron en una tumba en Israel que data de hace 12000 años.

El perro comía todos los restos que el ser humano dejaba con lo que al final se hicieron omnívoros como nosotros, es decir comen de todo (carne, cereales, fruta, etc). Solo algunos alimentos son contraproducentes para ellos como el aguacate, el ajo, la cebolla, el chocolate, … Por tanto la composición equilibrada de la comida del perrito es fundamental como la calidad de la misma. Una mala alimentación suele acarrear problemas médicos a medio y largo plazo.

Por otra parte el perro es un animal de manada, en su caso jauría. ¿Esto qué quiere decir? Que necesita de una jerarquía. Cada perro va intentar tener un puesto en esa jerarquía, y nosotros debemos proporcionarle ese estatus pues le hará más feliz. El puesto que debe ocupar dentro de la familia, que sería su jauría, debe ser el último. El perro no es infeliz por ser el último; es infeliz si no tiene un sitio definido. Si el perro no tiene claro cual es su sitio o dejamos que ocupe los lugares altos de esa jerarquía nos dará problemas de comportamiento que cuando menos serán incómodos.

En definitiva, el perro es un animal de comunidad, necesita de nosotros en todos los ámbitos, lo que nos obliga a un compromiso con él y con sus cuidados.

Naturaleza del gato:

El gato llegó a convertirse en mascota del ser humano mucho más tarde. Se entiende que a partir de una tumba descubierta en Chipre donde se halló el cadáver de un felino junto al de su dueño, nos sitúan alrededor del 7000 AC. Aunque la verdadera domesticación del gato se le atribuye a los egipcios alrededor del 3000AC. Los egipcios ya los tenían integrados dentro de sus casas y eran adorados como parte de sus deidades.

El gato es un animal territorial
Cada espécimen tiene su territorio. Sólo se juntan para procrear de forma natural. Somos nosotros los que les hemos obligado, en determinados casos, a compartir territorio con otros en nuestras casas u otros espacios como las colonias urbanas o puntos de comida.

El gato, por ello es más independiente, solo necesita su comida, su agua y su arenero como base. Además es adecuado que tengan sitio de actividades y juegos, acceso a un lugar soleado y a un sitio adecuado para dormir, si es en altura mejor.

Su territorio suele ser la casa donde vive, y a nosotros nos permite vivir en ese espacio. De hecho nos marca cada día como parte de él. En gatos muy territoriales puede suponer un problema las visitas y por supuesto la introducción de otros gatos, al margen de ser macho o hembra. Por ello les afectan mucho los cambios dentro de ese espacio en el que viven. Mudar muebles de un lado a otro, nuevos miembros de la familia, (sobretodo nuevas parejas, compañeros de piso o familiares que pudiesen comenzar a vivir en ese espacio), obras, etc.

Si quieres saber más sobre el estrés de tus gatos puedes leer nuestros posts: “¿Sabes si tu gato sufre estrés?” y “5 Consejos para enriquecer el ambiente a nuestros gatos”

Por otro lado la alimentación del gato esta basada sobretodo en la proteína ya que son carnívoros (Se introdujeron en las viviendas para que cazaran ratones y otros animales). De hecho, muchos de ellos, si tienen posibilidades, suelen cazar. De igual forma que en los perros la calidad de la comida que se le da va a influir directamente en su estado de salud, y si no es la adecuada, como en los perros, acabará por provocar problemas médicos.

Como vemos los perros y los gatos son muy distintos y por ello hay que conocer de dónde vienen y cómo actúan para poder entenderlos mejor.
Sentimos un gran amor por ellos pero si queremos que sean felices no podemos perder de vista sus orígenes y su naturaleza. Humanizarlos suele acarrear consecuencias, cuando menos, incómodas.

Esperamos que este post te haya podido ayudar. Pero si te siguen quedando dudas siempre puedes ponerte en contacto con nosotros.